jueves, 27 de diciembre de 2018

Sembrando valores

Entendí que:

Preferir comprar en el supermercado antes que al buhonero no es de sifrinos, es educación...
Tocar la puerta y esperar que te avisen que puedes entrar no es falta de confianza, es educación.
No revisar el teléfono celular de tu pareja no es descuidar lo tuyo, se llama respeto, es verdadera confianza...
Comer sin manosear la comida del otro no es de ridículos, es educación...
No darle besos en la boca a los bebes no es de padres quisquillosos, es educación...
Tener limpia y organizada la casa no es de enfermos, es educación...
Llevar al trabajo tu comida hecha en casa no es de pobres, es saludable.

Es que esos detalles que a veces pasamos por alto, que algunos consideran 'tontos' o incluso exagerados, que muchos critican y ofenden hasta hacerlos 'pasar de moda' para dejar entrar a la palestra todo lo contrario, es lo que va deteriorando una sociedad. Trae desde enfermedades hasta problemas familiares. Pues he allí lo que carecemos en este momento y que a la vez añoramos: los valores.

Es que por comprarle al buhonero ha muerto gente que consumió yuca amarga...
Es que por abrir sin tocar la puerta un niño vio una situación de adultos no apta para su edad que le puede marcar su niñez.
Es que hay virus que, por falta de higiene se convierten en enfermedades que se transmiten entre los fluidos de las personas.

Y nada de esto es exageración!

La ignorancia, mas allá de no saber algo, es negarse a ver mas allá de nuestras narices para mirar lo que nuestros actos pueden afectar a nuestro entorno. Por eso es la base de la pobreza, de la miseria.

Se cae en la ignorancia al dejar perder esos detalles, detalles que son semillas de valores.

A todos los que construimos la sociedad en la que queremos vivir, tenemos la opción de mantener estos detalles, de seguir sembrando esas semillas de valores sin desmayar, porque la ignorancia se erradica con la educación. Y la educación jamas se pierde!

jueves, 20 de diciembre de 2018

Lo positivo también es real

En esta sociedad en la que se ve mal a quien mira el lado positivo de la vida, tildándolo de 'vivir en la nubes' o fuera de la realidad; sociedad en la que se ha tomado tan en serio aquella frase que dice: 'Piensa mal y acertaras', que confunde e iguala el ser realista con ser negativo, es una sociedad que sencillamente ha perdido la esperanza y con ello, le ha cerrado las puertas a otro lado REAL de la vida, el lado del optimismo.

Limitamos nuestra mente hasta movernos solo entre dos opciones: los extremos

Y esta es una forma muy pobre de vivir la vida, pues tendemos a creer que la solución esta tapando lo malo con lo bueno, y en eso, una persona sumida en el negativismo se vuelve experto y ademas cree que el positivo actúa igual.

Al corrector de ojeras se le llama maquillaje porque tapa las ojeras pero no las quita, y si nos vemos al espejo nos vemos perfectas pero por dentro sabemos que en la noche, al quitar esa pintura, las ojeras estarán.

El primer paso para encontrar la solución no es tapar, no es obviar, no es mirar lo bonito (porque eso solo es autoengañarnos), el primer paso para hallar la solución, es sencillamente reconocer que hay un problema (sincerarnos). El primer paso para ser optimista no es comenzar a ver lo bueno, es mirar y reconocer que hay algo malo o negativo.

El optimista no es un soñador en las nubes, es un realista. El negativo centra tanto su mente en el problema que no ve mas nada sino lo negativo, y eso, no es nada realista.

Así como mueren personas, también nacen
Así como hay delincuencia, también hay honestidad
Así como se cierran empresas, también se abren otras
Así como hay gente que cree que no puede, hay gente que cree que si puede
Así como no se encuentra que comer de lo habitual, se encuentran alternativas
Así como se termino la temporada de mangos, comienza la de aguacates... Y así funciona todo en la vida.



Porque una persona con cáncer no sale de su enfermedad negando que la tiene, esa persona sale de su enfermedad justamente porque al saber que la tiene (mirando lo malo), asume su condición y busca las alternativas (mira lo bueno) y hace lo que debe para de ella salir.


Nota: la frase de la imagen la tome de un post de @OscarMisleTerrero


jueves, 13 de diciembre de 2018

Orgullo o Dignidad


Así como cuando te da un no se qué, tipo rabia con molestia cuando por ejemplo necesitas un desodorante y (con suerte) te encuentras con tremenda cola para poder comprarlo, a ese sentir algunos lo llamaran como que estas cargado de orgullo pero eso no es estar lleno de orgullo, esa rabia es sencillamente que te ha tambaleado algo que se llama dignidad.

Y hablando de los precios, el que te parezcan exorbitantes, o que el sueldo no te alcance y te impulsen a quejarte, y ponle la excusa que sea, la guerra económica o la hiperinflación, tampoco es orgullo, es que también se esta vulnerando tu dignidad.

El hecho de tener que ir a mendigar...perdón!!, comprar una caja de comida que el gobierno te subsidia, no lo haces porque tienes que bajarle al orgullo, en realidad lo haces porque sin darnos cuenta poco a poco hemos estado perdiendo la dignidad.

El tener que ir, en contra de tu voluntad a sacarte un carnet, o a votar, algunos porque creen que luego les negaran alimentos, servicios básicos o puestos de trabajo, otros por creer que colaboran en la solución, eso no es ni colaborar ni bajarle al orgullo, eso mi querido amigo también da muestra de que estamos perdiendo la dignidad.

El hecho de asistir a una concentración política a la que te 'invitan' en tu lugar de trabajo, y aunque no sea parte de tu labor, sientes que TIENES que asistir, disfrazalo con todas las excusas que te hagan sentir mejor, pero si en el fondo tú no quieres hacerlo y sientes obligación de hacer, no te resistes porque estés cargado de orgullo, es que se esta vulnerando tu dignidad.

Se esta lleno de orgullo cuando lo que se siente es que nos disminuimos con respecto a los demás. Solo se pierde el orgullo cuando en nuestros actos o decisiones sentimos libertad y si por el contrario, cuando en nuestros actos y decisiones sentimos tambalear nuestra libertad, sencillamente allí lo que estamos perdiendo es la dignidad.

La Dignidad es la expresión de nuestra libertad y el orgullo es la expresión de un sentimiento de inferioridad.

Cuando perdemos orgullo, recuperamos la dignidad, y muchas veces, por estar llenos de orgullo, podemos elegir perder la dignidad.

La navidad es tiempo propicio para la reflexión, y ojala esto nos invite a pensar, sincerarnos y reflexionar que es lo que estamos perdiendo!!!